Maravilloso!
Disfrutamos unos días de descanso y tranquilidad en Bordemundo. El amor de Javiera, su predisposición y el entorno natural donde están ubicados no podría ser mejor!
La cabaña es preciosa, limpia, acojedora, calentita y tiene todo lo necesario para no salir de allí.
Disfrutamos de los animales que tienen, del enorme parque y de la playa, les recomiendo ir varios días y hacer caminatas!!
En el aire se siente el amor y ni hablar de los mimos que nos han hecho cada día con pan casero, dulces y sorpresas...Sin duda volveremos!!!
- Se alojó el Abril de 2016, viajó en pareja
- País: Argentina
